Rabia..

Y pasaron meses y como si nada hubiese pasado aquel día en el que las lagrimas invadían mis ojos, y hoy te presentas pidiendo algo que hace tiempo que perdiste tras tu marcha, algo que jamas tendrás derecho a reclamar desde que mataste a mi alma, a mis ganas de sentir y a toda aquella ilusión en la que me bañaba. Y que te atreves a pedirme ahora un perdón, y tu conciencia tranquila... lo siento pero hace tiempo que aprendí a tener dignidad, a luchar por lo que quería y  a no dejarme pisotear por cualquier imbécil que se cruzara por mi camino, y tu te dedicaste a hundirme en lo mas profundo de aquel hondo mar. Pues lo siento pero ni conseguirás mi perdón, y mientras que yo viva jamas dejare que tengas tu mierda de conciencia tranquila.